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Latinos en el Super Bowl LVIII: Isiah Pacheco de Chiefs


Conoce al corredor puertorriqueño, Isiah Pacheco. Se consagró campeón con los Chiefs de novato y ahora podría ganar su segundo Super Bowl en dos años.


Serie «Latinos en el Super Bowl LVIII»:

Jugadores en roster activo:

Jugadores en escuadra de prácticas:

VIDEO: El Super Bowl, un sueño cumplido para Alfredo Gutiérrez


Hay tantos jugadores que nunca llegan a un Super Bowl pese a estar en la NFL más de una década durante su carrera.

Sin embargo, el corredor Isiah Pacheco disputará su segundo Super Bowl en dos años y buscará su segundo campeonato con los Kansas City Chiefs. Sin duda, está viviendo su mejor momento.

No solo eso. Se ha dado a querer y a conocer por su gran talento, sus bailes al celebrar sus touchdowns, su pasión por el deporte y su personalidad dinámica.

Pacheco se volvió indispensable como titular en la ofensiva de los Chiefs. Compacto a sus 5 pies 10 pulgadas de estatura y 216 libras de peso, ha demostrado velocidad relámpago este año. En la temporada regular de 2023, Pacheco sumó 205 acarreos para 935 yardas y 7 touchdowns por tierra.

También registró 44 recepciones para 244 yardas y 2 anotaciones más. Solamente tuvo un balón perdido en toda la campaña. Mejoró en todas las estadísticas comparado con su año de novato.

En los tres partidos que Kansas City ha jugado ya en estos playoffs, Pacheco ha aportado 63 acarreos para 254 yardas y un touchdown en cada uno de los partidos (3 en total), más 6 recepciones para 27 yardas.


Al escuchar a Pacheco, es consistente en su mensaje personal, en las cosas que son importantes para él. Lo primero es siempre la familia: sus padres y hermanos.

El chico de 24 años nacido en Vineland, New Jersey se mantiene humilde gracias a los valores que le han inculcado sus padres Felicia Cannon y Julio Pacheco. El amor por su madre es tan inmenso que la mantiene cerca de su corazón en todo momento con una cadena que lleva su apodo, “Jody”.

La tragedia tocó sus vidas cuando mataron a su hermano mayor Travoise en 2016 y apenas un año después cuando fue asesinada su hermana Celeste, a quien Pacheco consideraba su mejor amiga.

Tragedias de tal magnitud podrían detener el progreso en la vida de cualquier persona. Sin embargo, Pacheco ha utilizado su tristeza como inspiración.

Él le dedica cada carrera a sus hermanos que ya no están. Tiene sus imágenes tatuadas en su brazo derecho, una manga como eterno recordatorio, manteniendo vivo el amor.

Uno de los valores que Pacheco menciona haber aprendido de sus padres es “respetar para que te respeten”. Es una filosofía que aplica en su vida diaria y en el equipo.

El lunes pasado en el Día de los Medios del Super Bowl LVIII en el Allegiant Stadium, Pacheco dijo lo siguiente, “Los Chiefs se han convertido en mi familia, sabiendo lo duro que trabajamos en la práctica, sabiendo que nos apoyamos los unos en los otros durante la adversidad. Eso demuestra cuánto nos queremos unos a otros, comprendiendo que el panorama general de todo es ganar”.

Así es, para Isiah Pacheco lo primero siempre es la familia… y esa familia ahora incluye también a los Chiefs.


Pacheco tiene ascendencia puertorriqueña por el lado de su padre Julio y está muy orgulloso de su identidad latina.

El lunes pasado en el Día de los Medios del Super Bowl LVIII, el astro de segundo año comentó, “Significa mucho para mí representar mi cultura, simplemente tener el último casco del Salón de la Fama en lo que fue el Super Bowl el año pasado y ahora este año poder hacerlo nuevamente. Tienen que ponerlo ahí”.

Resulta que el Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional en Canton, Ohio decidió exhibir el casco que llevó Pacheco en la temporada 2022 y en el Super Bowl LVII — con una calcomanía de la bandera de Puerto Rico, luego de que la NFL alentara a los jugadores a usarlas para celebrar su herencia.

Pacheco tampoco esconde su alegría desbordante y espontánea. Después de anotar un touchdown en el Super Bowl pasado en el State Farm Stadium, en seguida celebró bailando en la zona de anotación. Confiesa que sus sobrinas le sirven de musas. Cuando las visita, ellas están viendo y grabando videos en TikTok, él dice que se les acerca y trata de aprender sus pasos.


Algo más que define a Pacheco es la disciplina y la consistencia. Con esa diligencia a lo largo de su carrera universitaria, culminaría sexto en la lista histórica de Rutgers con 563 acarreos y séptimo con 2,442 yardas terrestres.

Después de cada partido, Pacheco ya menciona las prácticas para el próximo encuentro. Si parece una máquina al correr es porque aplica la estrategia de “The five P’s” (Las cinco P’s), que le ha enseñado el coach de corredores de los Chiefs, Todd Pinkston.

Se llama la estrategia de “Las cinco P’s”, ya que las cinco palabras en inglés empiezan con la letra ‘P’: “Proper preparation prevents poor performance”, lo cual se traduce así (no son cinco P’s en español): “Una preparación adecuada evita un mal rendimiento”.

Pacheco busca eliminar distracciones para enfocarse en su trabajo. Solo de esa manera podrá conseguir la mentalidad necesaria para ganar.

Mostró la madurez de todo un veterano cuando dijo esta semana en Las Vegas, “Hacer lo que sea necesario para poner comida en la mesa. Esa es la mentalidad que tenían en el pasado; esa es la mentalidad que yo llevo”.


Camino al Super Bowl LVIII ante los San Francisco 49ers, la buena noticia para los Chiefs es que Pacheco no recibió designación de lesionado luego de haberse visto limitado en varias prácticas la semana pasada por problemas de tobillo y dedo del pie.

Los Chiefs lo necesitan más que nunca, por la magna importancia del encuentro, y porque el corredor No. 2 del equipo, Clyde Edwards-Helaire, practicó de forma limitada el jueves por enfermedad. Por otro lado, el corredor reserva Jerick McKinnon, designado para volver de la reserva de lesionados el sábado, ha estado limitado.

Además, Pacheco sabe muy bien que el haber llegado al Super Bowl sus primeros dos años en la liga no garantiza cuándo o si habrá una próxima vez.





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