Para que un club tenga el éxito que tiene Columbus Crew no se llega sólo con lo que sucede dentro del campo de juego. El Crew fue campeón dos veces en las últimos cuatro ligas, sin contar la corriente que puede ser de la partida. 2020 y 2023 fueron los años de consagración, entre los que hay muchos cambios, jugadores, entrenadores, pero la línea es la misma.
Uno de los mejores movimientos que ha hecho la franquicia fue la llegada de Diego Rossi en 2023. Lo que fue una baja sensible, como la salida de Lucas Zelarayán, emblema de la franquicia campeona en 2020, y titular indiscutido, se palió con el arribo del uruguayo. Fue un movimiento muy rápido, pero sobre todo, muy inteligente.
Como fue mencionado, el 10 argentino que representa a la Selección de Armenia, era una pieza clave y fundamental para la creación de juego del equipo. Con su velocidad, dinamismo, calidad y gran pegada, le aportaba un extra al funcionamiento colectivo, que pocos jugadores podían hacerlo. Su marcha al fútbol árabe, en medio de la temporada, no fue tan fuerte gracias a que los dirigentes se movieron rápido por un jugador que no necesite adaptación alguna, y rinda al momento. Diego Rossi fue el indicado.
Un delantero que probó suerte en Europa tras formar parte del LAFC campeón de 2022. No llegó a ganar la MLS Cup, ya que se marchó antes, pero si se coronó en el Suppoter´s Shield. Conocía de sobra la liga, y así lo demostró, transformándose rápidamente en una pieza inamovible del XI de Columbus Crew.
